Me despertó una voz a los pies de mi cama. Una anciana de pelo largo y un vestido oscuro hablaba desde las sombras. Fue lo último que vi antes de morir.
Desde entonces, voy de dormitorio en dormitorio alertando a quien me quiera escuchar.
Los que no me creen, los llevo conmigo para que me ayuden a contar mi historia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario